Consejo: no la metas.
No lo sé, la verdad, pero poco; muy poco. Y más que lo que tarda en congelarse, es lo que tardaría en "dejar de funcionar". Prueba a meter la mano en un cubo con mucho hielo, como los que hay cuando hay una fiesta grande en el campo, donde tienen guardadas las latas para que estén frías. No tardarías nada en darte cuenta de que ya no puedes mover los dedos, ¿verdad?
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